Todas las grandes cadenas de la multinacional registraron aumentos moderados
El primer semestre fiscal de Inditex (febrero-julio) confirma la desaceleración en su ritmo de crecimiento. El grupo gallego obtuvo un beneficio neto de 2.791 millones de euros, apenas un 0,8% más que en el mismo periodo del año anterior, mientras que los ingresos ascendieron a 18.357 millones, con un avance del 1,6%. Pese a la tibieza de las cifras, la reacción del mercado ha sido positiva y las acciones de la compañía llegaron a subir un 6% en Bolsa tras la publicación de resultados.
Todas las grandes cadenas de la multinacional registraron aumentos moderados en ventas, salvo Massimo Dutti, que retrocedió un 1%. A tipo de cambio constante, la facturación habría crecido un 5,1%, pero el efecto negativo de las divisas —con un dólar y un peso mexicano más débiles— restó más de tres puntos a la evolución del negocio. Para el conjunto del ejercicio, Inditex prevé que este impacto reste cuatro puntos a sus ventas.
El margen bruto se situó en 10.703 millones de euros, un 1,5% más, equivalente al 58,3% de los ingresos. El ebitda alcanzó los 5.114 millones (+1,5%) y el resultado antes de impuestos fue de 3.601 millones (+0,1%).
En la presentación a analistas, el consejero delegado, Óscar García Maceiras, destacó la solidez del modelo de negocio en un contexto marcado por la debilidad del consumo en los principales mercados y por un inicio de año con condiciones meteorológicas desfavorables para la venta de moda.
De cara a los próximos meses, la empresa muestra optimismo. Entre el 1 de agosto y el 7 de septiembre, las ventas en tienda y online crecieron un 9% a tipo de cambio constante respecto al mismo periodo del año pasado, apoyadas en la buena acogida de las colecciones de otoño/invierno.
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