Foot Locker es pesimista con este 2022. La cadena ha anunciado que espera una caída en los ingresos de entre el 8% y el 10%. Y el gran "culpable", más allá de el contexto socioeconómico, es Nike. La estrategia DTC de la marca americana conlleva que la cadena venda menos productos del que es su principal proveedor.
Y la cosa es seria. Las acciones de Foot Locker se desplomaron un 34% por este sombrío pronóstico para todo el año y, sobre todo, por las dificultades que va teniendo año tras año el minorista de calzado por el crecimiento de las ventas directas de Nike.
Tal es la dependencia de Foot Locker con la marca, que en los últimos años ya ha empezado a reducirla por si el DTC sigue manteniendo este frenético ritmo de crecimiento. La cadena espera que en este 2022 Nike represente "apenas" un 60% dde sus ventas, frente al 70% del año pasado y el 75% de 2020.
“Siempre pensamos que la posición de Foot Locker como 'socio estratégico' los aislaría un poco del impulso de DTC de Nike... pero este es un cambio dramático”, dijo Tom Nikic, analista de Wedbush.
Nike, que ha luchado contra los problemas de la cadena de suministro y el cierre de las instalaciones de producción durante el último año, se ha estado moviendo cada vez más hacia la venta directa a los consumidores, en lugar de centrarse en la venta al por mayor. En su último trimestre, las ventas de DTC aumentaron a 4700 millones de dólares, lo que representa alrededor del 40% de las ventas totales de Nike.
Y quienes piensen que las grandes cadenas están a salvo de esta estrategia, está muy equivocado. La empresa de ropa ha reducido significativamente la cantidad de minoristas a los que vende y, aunque sí es cierto que la gran mayoría son comercios independientes o pequeñas cadenas, también ha caído de su lista VIP algún que otro gigante. Y si no, que se lo pregunten a DSW.
“Todavía tenemos acceso a todos esos productos. Simplemente veremos diferentes cantidades fluir hacia nosotros”, dijo el director ejecutivo de Foot Locker, Richard Johnson.
En un intento por combatir la caída de las ventas, Foot Locker se ha apoyado en otras marcas, incluidas Adidas, Puma y Timberland, para mitigar los riesgos de la nueva estrategia de Nike, al tiempo que amplía su oferta de ropa y lanza marcas propias para diversificarse.