La economía china registró en 2012 su menor expansión en una década, al crecer un 7,8%, aunque el repunte del 7,9% del último trimestre allana el camino para consolidar la recuperación durante este año. "Por encima de todo, la economía se ha estado estabilizando", aseguró la Oficina Nacional de Estadísticas.
Pese a que el dato está muy por debajo del 9,3% de crecimiento que la segunda economía mundial registró en 2011, y aún más lejano del 10,4% alcanzado en 2010, se encuentra por encima del 7,5% fijado por el régimen comunista en marzo del pasado año.
Entonces, durante la celebración anual de la Asamblea Popular, el Gobierno redujo la expectativa de crecimiento del 8% a un más factible 7,5%, y, ante la debilidad financiera de sus principales socios comerciales (la UE y EE UU), anunció su intención de impulsar la demanda interna.
El aumento del 7,9% a ritmo anual registrado en el último trimestre rompe la dinámica de declive de los siete trimestres previos, un repunte que la Oficina adjudica a las medidas de estímulo dictaminadas por el Gobierno durante 2012.