Lorpen renueva su branding y lanza el nuevo calcetín T3

Hace más de 30 años que Lorpen desarrolla la mejor tecnología en calcetines para actividades outdoor. Con sede en Etxalar, un pequeño pueblo cercano a los Pirineos, la marca ha sido capaz de adaptarse al paso del tiempo sin cesar en su afán de crear los calcetines técnicos perfectos. Una pasión que se empezó a labrar de forma artesanal y que a día de hoy cuenta con fábricas propias y máquinas especializadas capaces de crear pequeñas obras de arte, de las que destacan sus calcetines de 3 capas hechos con tecnología T3. Esta tecnología que la marca creó hace ya varios años le ha colocado en la cima de este nicho de mercado, siendo actualmente el líder indiscutible de su segmento.

Su especialización avala su expertise y su excelencia en el ámbito del calcetín deportivo. Lorpen cuenta con el conocimiento, la experiencia y el arrojo para crear sus propias tecnologías por capas o sus propios calcetines Polartec, liderando las tendencias del sector. Sin duda, se puede decir que desarrolla ingeniería para los pies y es que su know-how y su ubicación estratégica en las faldas de los Pirineos hacen que puedan crear las mejores soluciones en calcetines desde dentro, desde el mismo medio natural. Los que trabajan en Lorpen viven la realidad de la Naturaleza y saben lo que el consumidor necesita para las diferentes actividades que pueden llevar a cabo en ese entorno.

Por su parte, el consumidor lo percibe. Una robustez destacada, un compromiso de calidad y la satisfacción de miles de clientes hacen de Lorpen una apuesta segura, categóricamente superior. El consumidor de Lorpen sabe que sus calcetines son sinónimo de una salubridad óptima para sus pies, sea cual sea su meta, ya que Lorpen dispone de una amplia oferta de calcetines en base a la actividad que se vaya a desarrollar. Es capaz de vestir los pies de un alpinista, de un corredor de montaña, de un esquiador o de un peregrino del Camino de Santiago.

Su especialización en un solo producto le ha llevado a Lorpen a ser los líderes, a hacer mejor que nadie un producto que aparentemente parece sencillo de diseñar y de fabricar pero que, sin embargo, conlleva mucho trabajo y dedicación en cuanto a investigación de materiales y composición óptima del producto. Lorpen, a pesar de ser una marca local, arraigada al Pirineo, es conocida a nivel mundial y, de hecho, tiene una aspiración global. A día de hoy está en más de 60 países repartidos en tres continentes y viste a deportistas de todo el mundo.

Por todo esto, Lorpen ha dado un paso más y ha renovado su branding, con el objetivo de adaptarse a los nuevos tiempos y a las nuevas tendencias, igual que hace con su oferta de calcetines. A nivel de producto, para la primavera 2019 la principal novedad de Lorpen es su modelo T3 Light hiker merino no show, que completa su gama T3 estival. Este calcetín, que mantiene las características de los calcetines T3 lihgt hikers, que garantizan un pie seco y bien protegido con calzado de verano, está compuesto por un 50% de Nylon, un 23% de Coolmax, un 17% de Tencel y un 10% de Stretch Nylon with Lycra.

Estas novedades se han dado a conocer durante la convención de PV 19, que se ha celebrado en Etxalar esta semana y a la que asistió la red comercial nacional e internacional de la marca. Durante la jornada, además, se hizo una visita a la fábrica y se disfrutó del entorno con un trekking por las montañas cercanas a Etxalar, que dieron fe del enclave incomparable originario de la marca Lorpen.